Para su último concierto del año, McCartney se aseguró de traer sorpresas con él en el O2 Arena de Londres, anoche jueves 19 de diciembre.
A mitad de su actuación, McCartney presentó «Get Back» hablando de su viejo bajo, que le robaron hace más de 50 años y que finalmente le fue devuelto a principios de febrero . Blandiéndolo en el escenario, reveló que era la primera vez que el bajo aparecía en el escenario desde que había desaparecido: «No lo he tocado en 50 años».
McCartney continuó, preparándose para otra sorpresa: “Y lo que es más, tenemos un invitado especial para ustedes aquí. Un Rolling Stone. Ronnie Wood”. Mientras Wood se dirigía al escenario, los dos se lanzaron a cantar “Get Back”.
Una vez que terminó la canción, los dos compartieron un abrazo rápido, con Macca levantando la mano de Wood triunfalmente en el aire: «Gracias Ronald».
