Estudio revela que la música que escuchas entre los 13 y 17 años deja el mayor impacto emocional en tu vida.
Una investigación publicada en la BBC concluye que la música escuchada durante la adolescencia (entre los 13 y 17 años) tiene un impacto duradero en la memoria y la identidad de las personas.
Este fenómeno, conocido como “golpe de reminiscencia”, se debe a la gran plasticidad cerebral de esa etapa.
La plasticidad cerebral es la capacidad del cerebro para cambiar su estructura y función a lo largo de la vida en respuesta a experiencias, aprendizaje o lesiones.
Escuchar una canción de la juventud puede activar recuerdos autobiográficos y emociones significativas.
Además, las preferencias musicales de esos años contribuyen a la construcción de la personalidad y los vínculos sociales, perdurando hasta la vida adulta.
“El impacto de la música en este período no solo se relaciona con el gusto, sino con la intensidad emocional de las experiencias vividas”, concluye el estudio.
Por eso, las preferencias musicales que desarrollamos en la adolescencia suelen acompañarnos toda la vida, despertando las mismas emociones incluso décadas después.
